En Halloween, el símbolo del gato negro tiene un papel importante. Se dice que es el disfraz que utilizan las brujas para pasearse tranquilamente por las calles de la ciudad la noche del 31 de octubre, y por eso se dice que que si un gato negro se te cruza por delante de ti, tendrás mala suerte... pero eso son supersticiones. ¡Los gatos negros son tan bonitos y buenos como los demás!
Esta manualidad reúne dos cosas que me encantan: Halloween y reciclaje de rollos de cartón. ¡Ya he perdido la cuenta de cuántos animalitos de cartón tenemos en casa! Como todas estas manualidades, este gatito se hace rápido y fácil, se necesitan muy poquitos materiales y el resultado es muy chulo, porque además de decorar se puede jugar con él.Materiales:
- 1 rollo de cartón
- Cartulina negra
- Cartulina rosa
- Tijeras
- Pegamento
- Silicona líquida
- Ojitos de plástico
- Limpiapipas blancos
¿Cómo se hace este gatito?
- Recorta un trozo de cartulina negra para cubrir el rollo de papel y pégala
- Dibuja dos arcos en la base y recórtalos (serán las patitas)
- Marca y recorta un círculo de cartulina negra para la cabeza
- Dibuja y recorta dos triángulos negros (las orejitas) y un rectángulo alargado y sinuoso (la cola). Recorta un triangulito rosa para la nariz, y dos más grandes para las orejas.
- Elige y pega dos ojitos, la nariz y las orejas a la cara del gatito
- Corta cuatro trozos de limpiapipas, dóblalos por la mitad y pégalos en la cara como bigotes
- Pega la cola y la cabeza al cuerpo
- ¡Y a jugar!